Como suele ser habitual en estas fechas, al igual que llegan los villancicos y los anuncios del turrón, «vuelve a casa por Navidad» el que será el color tendencia del próximo 2018, «La tendencia del 2018»

El «gurú» del color, Pantone, quien se supone que sabe más de todo esto nos anuncia que de cara al 2018 será el Ultra Violet el color que estará en «todas las salsas».

Tendencia. Según el diccionario «Idea o corriente, especialmente de tipo religioso, político o artístico, que se orienta en determinada dirección»

Hasta hoy, colores suaves.

Tras un 2016 donde predominaron colores suaves como el Rosa Cuarzo y el Azul Serenidad llegó 2017 con aires frescos y renovados, un canto a la vida, a la naturaleza y a la renovación, un color que inspiraba a salir al campo, a respirar aire puro, la esperanza plasmada en una gama cromática que inundó todo con alegría y que se hizo más presente si cabe en decoraciones.

Personalmente el verde no ha de faltar en ninguna decoración que se precie, es un color que aporta siempre, suaviza cuando predominan colores fuertes y da ese matiz de elegancia y sutileza en aquellas decoraciones donde predominan tonos fríos, el verde equilibra.

Color que engloba oposiciones.

Pues bien, este año la gama será Violetas, morados…… El violeta nace de dos oposiciones, azul y rojo, es un color vigoroso que surge de dos tonos fuertes y personales, que le aportan caracter ,personalidad y viveza.

Leatrice Eiseman, directora ejecutiva del Pantone Color Institute, apunta que «Es el más complejo de los colores», «es realmente un reflejo de lo que se necesita en nuestro mundo de hoy», y añade, «Queríamos elegir un color que aportara esperanza y un mensaje alentador», añadió.

Se trata de un tono púrpura intenso y brillante confeccionado, según Pantone, para expresar «originalidad, ingenio y pensamiento visionario que nos señala hacia el futuro».

Un color que ha servido de musa para artistas de la talla de Jimi Hendrix con aquel ‘Purple Haze‘, que recuerda al misterio y a la noche, a la meditación y a la paz de la mente. «Simboliza la experimentación y la inconformidad, estimulando a los individuos a imaginar su marca única en el mundo y empujar los límites a través de salidas creativas».

Ahora nos toca a nosotros, ¿somos capaces de apostar todo al morado?